Escritores: Mami yo quiero un negro. En la imagen fotograma de la película de Polanski, "The Ghost writer"

                                   




Yo también tengo algo que decir piensan los ciudadanos que en otra época no hubieran barajado la posibilidad de expresarse en cualquiera de los muchos medios que ahora están a nuestra disposición. El anonimato es el enemigo número uno en nuestra colectividad virtual.

     Con el auge de las nuevas formas de publicación que han subvertido las reglas de lo que hasta ahora era el sistema habitual de acceder a la literatura y la adoración a la fama que caracteriza a nuestra sociedad ha resurgido con fuerza una figura que  ha existido siempre, el negro literario o ghostwriter anglosajón que ahora se anuncia por internet para ofrecer sus servicios.  El sistema de promoción de Google y especialmente de la factoría Ámazón es una de las causas de su auge (Leer más)



     Ni siquiera el genio por antonomasia,  Shakespeare,  se libra de la duda y ya se dijo que en algunas de sus obras  el dramaturgo Marlowe ejerció de "negro",  un término  que proviene del francés y según  los críticos Michel Lafon y Benoît  fue usado en 1845 por Eugène de Mirecourt para desprestigiar a Alejandro Dumas padre. Actualmente un negro encargado de pergeñar las memorias de un político puede cobrar hasta 50.000 euros por su trabajo.
     Los servicios que no se contratan son los de plagio, la última frontera de las apropiaciones literarias de lo que han sido acusados escritores de tanto prestigio como nuestro Nobel Cela, Bryce Echenique, Saramago o Carlos Fuentes.
     Pero en el resurgimiento de los gostwriter ha influido  algunos autores que tratan de hacer negocio en Amazón con sus obras, destacar y ser conocidos, algo que cada vez les resulta más difícil a los que trabajan con la pluma en el piélago de tantos libros a la busca de lectores que nos invade.  Al parecer, una de las maneras de conseguir entrar en las listas top del Kindle es publicar muchos títulos, es decir, alguien que saque un título al mes tiene más posibilidades de conseguir visibilidad que un autor que solo lance un libro cada dos años. Para ello, igual que las flotas de taxis con los conductores a sueldo, algunos escritores buscan más textos que les promocionen para su marca personal y naturalmente recurren a un negro que se llevará una mínima parte de los beneficios en este nuevo capitalismo salvaje que ha llegado para quedarse al mundo de la edición.   
     

Plagios literarios famosos
Entrevista a un negro literario
http://lapiedradesisifo.com/2013/08/13/escritores-fantasmas-y-negros-literarios/
http://www.perdidasentrepaginas.com/2012/08/escritores-negros.html

Comentarios

  1. Guardo tu post, querida Teresa, en "EverNote" porque no sabía el origen de la palabra "negro" aplicada a escritores a sueldo que venden su autoría. Muy interesante. Lo tuiteo.

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  2. Muchas gracias Juan Carlos. Los negros de escritores famosos han existido siempre pero me temo que ahora hay más que nunca. Un fuerte abrazo

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